La noche fría de Julio, nevaba, las personas estaban en sus casas a salvo del frío de invierno, pero entre los lotes de nieve que se habían hecho, había algo sepultado, algo que aun daba señas de vida.
Era el joven Andrew, un miembro del equipo gamma, los cuales son una poderosa fuerza táctica que se encarga de combatir a escondidas de la sociedad, la amenazas que ponían en peligro la paz que se respiraba.
Había caído ahí luego de una dura misión, parecía que moriría congelado y solo, pero en algún momento de inconsciencia, despierta en un sofá y puede sentir una cálida chimenea, se levantó y reviso por los cuartos cercanos si se encontraba la persona que lo salvó de la muerte blanca.
No logró encontrar a nadie, se decidió quedar un rato en el sofá y al cabo de un poco más de una hora, sintió que alguien entraba. Grande fué su sorpresa al ver que era una pequeña niña de unos 12 años mas o menos, la niña lo saludó y el respondió con lo mismo, luego empezó a hacerle unas preguntas:
A: Como te llamas?
N: Carla - sonrió-
A: Porque me has traído a tu casa?
C: Eso no importa señor, lo importante es que se encuentra bien -sigue sonriendo-
A: En eso tienes razón, gracias pequeña. Oh y, Mi nombre es Andrew, aunque todos me dicen Andy. Un gusto.
C: Jeje
A: Oye, tus padres no se molestarán por traer un extraño a casa?
C: Pues, vivo sola, mis padres murieron hace unos años.
A: Ohhh, pues, lo siento mucho.
C: Descuide señor -vuelve a sonreír-
Ambos siguen hablando unos minutos mas, Andrew le ofrece a la niña que si quería acompañarlo a su lugar de trabajo, porque pensó que una niña no daría problemas, era una buena idea, pero luego su opinión sobre la decisión se invertiría...
Luego de un largo camino, Andrew y la pequeña Carla llegan a la base del Equipo Gamma, ahí lo recibieron y luego al ver a la niña, Joseph, uno compañero del equipo le reprime discretamente por traer a la niña.
Andrew, de todos modos, siempre iba con la niña a la base, la cuál no incomodaba a nadie y no les daba problemas en su trabajo al equipo, pero lo extraño de su presencia, era la extraña conducta de Andrew. El siempre fué conocido por ser el miembro más reservado, terco y frío que había, pero esa conducta desaparecía cuando estaba con la niña llegando incluso a tener aires de espíritu paternal con ella, y también era el más encariñado a ella, la cuál también tenía una actitud tierna con todos los miembros, al cabo de unos días, no había ningún miembro que no se hubiera encariñado con la niña, a lo cuál, todos concluyeron que ella era su algo así como su fuente de ánimo con lo que no habían altercados internos.
Han pasado ya 4 meses desde que esta historia comenzó, y todo parece andar de maravilla. De Repente suena la alarma de amenaza seria y ya es hora de actuar para el Equipo Gamma...
Continúa en Otro Post, algún día...
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